ANTE ÉL: TODOS SOMOS SACIADOS
- favcoamo
- Apr 14
- 2 min read
Updated: Apr 15

Reflexión basada en Juan 4:7-30
Hoy quiero hablarte de una historia sencilla, pero poderosa. Es la historia de una mujer como cualquiera de nosotros, que se encontró cara a cara con Jesús… y todo cambió.
Tal vez tú también has venido cargando tu “cántaro” por años… Vacío, buscando algo que te sacie, algo que te dé sentido. Así estaba ella, acostumbrada a una rutina, a esconderse, a buscar agua en el momento en que nadie más lo hacía. Pero ese día todo cambió. Ese día se encontró con Jesús.
Y Jesús le dijo algo que lo cambió todo:
“Si conocieras el don de Dios…”
Eso fue lo que marcó el comienzo de su transformación.
Hermano, si tú supieras el regalo que Dios tiene para ti, si pudieras ver todo lo que Él ha preparado para saciar tu alma… no seguirías cargando lo que cargas. Esa mujer, al conocer el don de Dios, dejó el cántaro. Lo dejó porque ya no lo necesitaba. El vacío que antes trataba de llenar con agua, ahora estaba siendo llenado por la presencia del Señor.
¿Y tú? ¿Qué cántaro estás cargando hoy? ¿Qué vacíos estás intentando llenar por tus propias fuerzas?
Tal vez, como ella, has estado evitando a los demás, has aprendido a sobrevivir, a callar, a esconder. Pero cuando estás ante Él, todo eso se desvanece. Su amor, su gracia, su verdad… te hacen libre. Y cuando conoces el don de Dios, ya no puedes seguir igual.
Hoy quiero invitarte a recordar el momento en que comenzaste a acercarte a Dios, o tal vez a dar ese paso por primera vez. Como aquella mujer, tu vida también puede cambiar con un solo encuentro con Jesús.
No sigas viviendo de la misma forma. Déjalo a Él saciar tu sed más profunda. Y cuando lo haga… deja tu cántaro, porque ante Él, todos somos saciados.
Comments